Así puedes utilizar estos 8 plugins de GIMP para convertirte en un profesional del retoque fotográfico

Cuando hacemos referencia a los programas de código abierto relativos al retoque fotográfico, mientras que en los comerciales el más usado es probablemente Adobe Photoshop, entre estos gratuitos el primer lugar posiblemente lo ocupe el ya veterano GIMP.
Pues bien, hay que tener en cuenta que los plugins que podemos implementar en este programa comparable al mencionado Photoshop, mejoran de manera ostensible a GIMP, ya que estos añaden nuevas funciones, mejoran el flujo de trabajo y ayudan a hacer del software una de las mejores alternativas gratuitas a la propuesta de Adobe.
Pero esta no es una tarea sencilla, ya que toda la experiencia del plugin para GIMP no es muy fácil de usar, pueden ser difíciles de encontrar, de instalar, y a veces podemos encontrar problemas de compatibilidad. Por tanto y para empezar con este tema, en principio os diremos que todo lo relacionado con los plugins de GIMP en estos momentos está un poco desordenado. Mientras que estos elementos solían ser recopilados en el registro del propio programa de retoque, eso ya no existe, lo que significa que ahora están dispersos por Internet.
Algunos son muy antiguos, ya que no se han actualizado en una década o más, por lo que no hay garantía de que funcionen bien en las versiones más recientes del software. Además el proceso de instalación también es algo complicado, veamos cómo hacerlo. En primer lugar podremos echar mano del método manual, por lo que si el plugin que nos interesa está en un archivo ZIP, entonces necesitamos copiar el contenido a las carpetas de plugins y scripts del programa como tal.
Cómo instalar los plugins de Gimp
De este modo, primero descomprimimos el fichero descargado y en GIMP nos situamos en “Preferencias / Carpetas”, donde localizamos las secciones de Plug-ins y Scripts. Hay dos carpetas en cada sección, una es la del sistema, y la otra es una carpeta de . Pues bien, nos decantamos por la segunda y hacemos clic en “Mostrar ubicación de archivo” para abrir el nuevo plugin. Por otro lado si el archivo a implementar está en formato PY, lo movemos a la carpeta “Plug-ins”, y si lo está en formato SCM, lo llevamos hasta la carpeta “Scripts”; y reiniciamos el programa.
Por otro lado podemos utilizar el que se podría denominar como método automático, válido para cuando los plugins vienen empaquetados con su propio instalador, por lo que simplemente hacemos doble clic en el fichero bajado y lo instalamos como lo haríamos con cualquier otra aplicación. Eso sí, hay que tener en cuenta que estos instaladores son específicos para utilizar en plataformas Windows, por lo que no los vamos a ver para Linux o Mac. Ahora bien, a continuación os vamos a mostrar algunos de los plugins más representativos y usados para este programa de retoque.