Ya puedes probar antes que nadie el nuevo Linux Mint 21.2: jamás volverás a usar Ubuntu

Si vamos a dar los primeros pasos dentro de Linux, es muy importante que sepamos elegir una buena distro. Aunque Ubuntu sigue siendo una de las más distros más conocidas y utilizadas en todo el mundo, existen muchas otras alternativas mucho mejores que ella, tanto en estabilidad y en filosofía Linux como en facilidad de uso, que, sin duda, no te dejarán indiferente. Y, así, si estás pensando en cambiar Windows por uno de estos sistemas operativos, una de las mejores opciones es, sin duda, Linux Mint.
Qué vamos a ver en Linux Mint 21.2
El nuevo Linux Mint 21.2 «Victoria» no va a ser una actualización muy grande, aunque sí que va a traer varias novedades interesantes, sobre todo en el apartado estético y en lo relacionado con la compatibilidad. Lo primero que nos llamará la atención es su nueva pantalla de inicio de sesión, mucho más limpia y funcional gracias a la posibilidad de cambiar la distribución de teclado, usar «toque para clic», e incluso veremos un nuevo botón para previsualizar la contraseña que escribimos.
La interfaz principal del sistema ha recibido algunos retoques, y se ha añadido soporte para Wayland, compatibilidad nativa con HEIF y AVIF, un nuevo modo oscuro y un aumento de velocidad en el explorador de archivos Nemo, entre otros cambios.
Cuándo llega
Ahora mismo solo está disponible la versión «beta» del sistema. Los s más impacientes, y experimentados, si quieren pueden probar este nuevo SO y ayudar a la comunidad a detectar, y corregir, cualquier posible fallo que se puedan encontrar en él.
Además, en la imagen ISO no será la final, sino que, probablemente, se trata de una Release Candidate, una versión casi definitiva que aún puede tener errores (aunque de baja gravedad).
Antes de ver la versión final, y que la nueva «Victoria» llegue a todos los s, seguramente tengamos que pasar, al menos, por otra Release Candidate más. Salvo que tengas especial interés en este sistema, desde SoftZone te recomendamos esperar antes de actualizar, para evitar problemas.