El Raspberry Pi es uno de los mejores micro-ordenadores, en cuanto a calidad-precio, que podemos comprar. Este puede ser utilizado para una infinidad de tareas, ya sea para tener un servidor de bajo coste en casa, para montar una retro-consola e incluso para enseñar programación y principios básicos de electrónica a otros s, entre otras muchas tareas. Para poder funcionar, este micro-ordenador debe llevar un sistema operativo, generalmente Linux, que se le instala en una micro-sd para que el micro-ordenador pueda arrancar. Y uno de los más populares, usados y recomendados es Raspbian.
Raspbian es el sistema operativo oficial del Raspberry Pi. Esta distro Linux está basada en Debian, pero adapta el funcionamiento general de esta distro a este micro-ordenador. Esta distro cuenta con un gran soporte, tanto por parte de los responsables de Raspberry Pi, como por parte de Debian y la comunidad.
El año pasado se lanzó una de las actualizaciones más grandes para esta distro Linux, Raspbian Buster. Y aunque desde entonces se han ido lanzando parches y actualizaciones menores, los responsables del micro-ordenador han querido empezar 2020 con buen pie, lanzando una nueva versión que, aunque no supone un salto tan grande como Buster, sí trae a los s una gran cantidad de mejoras y novedades que merecen la pena destacar.