A la hora de ahorrar espacio en nuestras unidades de disco, disponemos de varios métodos muy efectivos. Uno de los más comunes desde hace años es echar mano de los programas de compresión de archivos, soluciones software que nos ayudan en multitud de ocasiones. Aquí, entre las muchas propuestas disponibles, una de las más conocidas es WinRAR.
Este es un programa de compresión y descompresión de archivos que nos lleva acompañando desde hace años y ofreciendo funciones muy interesantes. Además, gracias a su veteranía se implementa la perfección con el sistema operativo para que lo manejemos de la manera más fluida y cómoda. De hecho, podríamos decir que WinRAR nos presenta varios modos de trabajo para que podamos utilizar el que más nos interesa en cada caso. No podemos olvidar que generalmente aquí lo que buscamos es un proceso rápido y efectivo.
Estos compresores de los que os hablamos no solamente nos sirven para ahorrar espacio. Al mismo tiempo nos proponen la posibilidad de aunar varios archivos en uno solo, por ejemplo, para su envío a través de internet. De igual modo estos archivos comprimidos no serán de mucha ayuda a la hora de almacenar nuestra información en el tiempo. Y es que no es lo mismo manejar cientos o miles de archivos, que tener que controlar uno solo que contenga todos los demás. Tal y como viene siendo habitual, WinRAR se implementa la perfección en el menú contextual de Windows, pero también podemos trabajar con el mismo desde su interfaz.
Pero a continuación os vamos a mostrar la manera más sencilla de comprimir y descomprimir archivos. Podemos afirmar que este método del que os hablaremos es el más interesante para los s noveles en estas lides.
Usa el asistente de WinRAR para ahorrar esfuerzos
Hay que tener en consideración que la mayoría de los
En concreto nos referimos a características tales como la asignación de una contraseña, qué hacer con los archivos una vez añadidos al comprimido, la creación automática de un ejecutable, o dividir ese nuevo fichero en varias partes.