En estos momentos y de manera convencional, la mayoría de los s hace uso de archivos y programas relacionados con la ofimática. Ya hablemos de aplicaciones populares como Word o Excel, además de archivos como TXT, DOCX, PDF o XLSX, entre otros.
De hecho, como seguramente que la mayoría de vosotros sabréis de primera mano, solemos trabajar con varios de estos elementos de manera simultánea. Así, podemos hacer que varios programas de este tipo, y sus respectivos archivos, interactúen entre sí. No olvidemos que, por ejemplo, las soluciones software que forman parte de la suite Office de Microsoft, están más que capacitadas para funcionar juntas.
Con esto lo que queremos decir es que es muy sencillo usar una tabla de datos numéricos Excel en otros programas hermanos con Access o Word, por ejemplo. Pero no es de eso de lo que os queremos hablar aquí, sino que nos vamos a centrar en los PDF. Estos son un formato de archivo propiedad originalmente de Adobe que no han parado de crecer en cuanto a uso con el paso de los años. De hecho cada vez más s usar estos PDF a partir de otros archivos como los creados en Word, Excel, desde fotos, etc.
Y es que estos nos presentan algunas interesantes ventajas para así poder usar mejor determinados documentos. Por ejemplo es más que habitual que convirtamos en PDF nuestras hojas de cálculo creadas en Excel. Esto, como os comentamos, es algo muy habitual, por lo que veamos las razones de ello. En concreto nos referimos a que vamos a ver las situaciones en las que debemos guardar las hojas de Excel en PDF.
navegadores abren estos archivos PDF de forma nativa.
Para almacenar archivos de forma segura
En muchas ocasiones, especialmente a nivel empresarial, vamos a necesitar almacenar para largos períodos de tiempo, determinados archivos. Lógicamente los creados en Excel son habituales para ello. Por tanto, en este caso igualmente es más que recomendable que antes de almacenar las hojas de cálculo, las convirtamos a PDF.