La memoria RAM de un ordenador es un tipo de memoria necesaria para que el PC pueda almacenar la información generada por los programas e intercambiarla rápidamente con la U para procesarla. A diferencia de los discos duros, este tipo de memoria es volátil, es decir, se borra por completo cuando apagamos el ordenador. Hoy en día es raro encontrar ordenadores con menos de 4 GB de RAM, y menos teniendo en cuenta que este va a ser el mínimo recomendado para Windows 11. Sin embargo, dependiendo de los programas que utilicemos, es posible que nuestro PC se quede sin RAM. Y esto puede darnos problemas.
Todos los programas que ejecutamos en el ordenador necesitan memoria RAM. Más o menos para poder trabajar, pero necesitan tener espacio. Windows cuenta con sistemas de control de memoria que se encarga de borrar todo lo que ya no es necesario de forma automática, e incluso comprimir datos cuando el espacio empieza a escasear.
Que Windows consuma más memoria RAM no es malo, más bien todo lo contrario. Esta memoria está para usarla, y cuanta más memoria tengamos disponible (por ejemplo, si tenemos un PC con 32 GB), más espacio usarán Windows y los programas al no tener que comprimir los datos para procesarla información más rápido. El uso de