Pull&Bear despide a un trabajador por usar el permiso de hospitalización para irse de viaje: esto dice la justicia
Un trabajador de la archiconocida cadena de Pull&Bear ha sido despedido tras este polémico caso. El afectado solicitó un permiso retribuido de cinco días, mientras que alegaba la hospitalización de su madre como motivo. Este derecho, recogido en el artículo 37 del Estatuto de los Trabajadores es esencial para cualquier trabajador. El problema es cuando se usa indebidamente.
En este caso, durante ese mismo periodo, la empresa ha descubierto que dicho empleado aprovechó el tiempo para irse de vacaciones a las Islas Baleares junto a otro compañero de la misma empresa. Y todo por unas fotos publicadas en las redes sociales, que fueron posteriormente utilizadas en el proceso judicial como prueba.
El caso llegó, como no podía ser de otra manera, al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. Dicho estamento del ámbito judicial lo tuvo claro: declaró procedente el despido disciplinario alegrando transgresión de la buena fe contractual. El hecho de haber utilizado el permiso para fines personales, y no para el cuidado de la madre hospitalizada, fue suficiente para el tribunal.
Este fallo judicial vuelve a poner sobre el tapete el uso correcto de nuestros derechos laborales y la correspondiente responsabilidad del trabajador del buen uso de los mismos. Y es que, ley en mano, el abuso de estos derechos cuesta el empleo, además de la no correspondencia a una indemnización.
Qué dice la ley sobre el permiso por hospitalización
El artículo 37.3b) del Estatuto de los Trabajadores reconoce expresamente el derecho de los trabajadores a ausentarse del trabajo de manera retribuida en caso de hospitalización de familiares de hasta segundo grado. Pero, como es obvio, este permiso tiene un fin concreto: la atención y el cuidado de dicho familiar ingresado. Esto no incluye el tiempo de ocio, ni mucho menos, unas vacaciones encubiertas.
Como no podía ser de otro modo, el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña consideró más que probado que el trabajador no utilizó el permiso para acompañar a su madre, sino para su periodo vacacional a Baleares. Las pruebas concluyentes fueron las fotografías que el trabajador publicó en las propias redes sociales. Algo que, por cierto, no fue nada hábil por su parte.
El tribunal sentenció que se había producido una transgresión de la buena fe contractual, que también se recoge en el artículo 5 del propio Estatuto. Motivo suficiente para que cualquier trabajador pierda todo derecho a indemnización. De hecho, la empresa tiene todo el derecho del mundo a actuar ante este caso y llevó a cabo un despido disciplinario. Este tipo de despido en particular supone que el trabajador pierde cualquier tipo de derecho a indemnización. Es decir, que se fue a la calle y sin ver un euro por su comportamiento.
Hay que recordar que, cuando el trabajador falsea la causa o se beneficia de cualquier derecho laboral para llevar a cabo una actividad distinta a la estipulada, la empresa puede actuar de oficio. Por lo tal, a este derecho también le corresponde una serie de deberes y límites legales que se han de respetar. Y obviamente, en las playas de Islas Baleares no lo estaba haciendo.
