Dependiendo del modo de uso que hagamos de nuestro ordenador, vamos a necesitar una serie de componentes conectados al PC, u otros. Esto es algo que como no podía ser de otro modo se hace extensible igualmente al nuevo sistema operativo de Microsoft, nos referimos a Windows 11.
Aquí no hablamos del procesador, la memoria RAM o las unidades de disco que formarán parte del ordenador. Más bien queremos centrarnos en aquellos componentes hardware que posteriormente conectamos e instalamos al equipo. Es recomendable elegir bien estos, ya que los usaremos de manera asidua y durante varios años. Entran en juego elementos de la importancia del teclado, el ratón, los altavoces, la impresora, o el monitor, entre otros.
De hecho, a continuación, nos queremos centrar en un elemento de salida tan importante como es la pantalla que utilizaremos a diario. Este es uno de esos componentes en los que merece la pena invertir algo más de dinero, y adquirir uno de mayor calidad, algo que con el tiempo vamos a agradecer. Es más, algo que se ha convertido en habitual en los tiempos que corren, es que necesitemos