Cada vez que Microsoft lanza una nueva actualización, previamente ha pasado por una fase beta para comprobar que funciona correctamente y no presenta ningún tipo de problemas. Sin embargo, el número de s Insider de Windows obviamente no es tan amplio como el número de s finales, por lo que, cabe la posibilidad se escape algún problema de funcionamiento y llegue en la versión final.
Un claro ejemplo de esto lo encontramos en la actualización 24H2 de Windows 11 que la compañía lanzó en versión previa hace unas semanas y que, debido al elevado número de problemas de rendimiento que tenía, se vio obligada a retirar para, unos días después, con los problemas ya resueltos, volver a ponerla a dispositivos de la comunidad Insider.
Además, no es la primera vez que Microsoft lanza una actualización final que no les sienta bien a todos los equipos gestionados por Windows. El caso más reciente lo encontramos, sin cortar el caso citado más arriba por no tratarse de una versión final, la
Esta actualización, no ha afectado por igual a todos los dispositivos gestionados por Windows, por lo que no se trata de una actualización que esté disponible para todos los s que todavía utilizan Windows 10, sino que, si no se muestra en al apartado Windows Update, estará disponible dentro del apartado Actualización de calidad opcional disponible.
En ambos casos, debemos pulsar en Descargar e instalar para solucionar este problema y reiniciar el PC para que el parche haga su trabajo y solucione este molesto problema que tantos dolores de cabeza ha ocasionado a miles de s que todavía no han actualizado a Windows 11.
Y es que debemos tener en consideración que al hablar de a la barra de tareas de Windows, nos encontramos con uno de los elementos integrados en el sistema más utilizados. Al margen de estar siempre a la vista, aquí anclamos las aplicaciones y funciones qué más vamos a utilizar para poder acceder a las mismas en cualquier momento.
Fin del soporte de Windows 10
Queda poco más de un año para que Microsoft se olvide por completo de Windows 10 y deje de lanzar nuevas actualizaciones, tanto para añadir funciones para solucionar problemas de funcionamiento que pueda presentar. Únicamente seguirán recibiendo actualizaciones los s que contraten el soporte extendido que tiene una duración máxima de 3 años y que está destinado a empresas.
La fecha límite se está fijada para el 14 de octubre de 2025, tiempo más que suficiente para empezar a ahorrar y comprar un equipo que si sea compatible con Windows 11, ya sean los nuevos modelos con procesador ARM de Qualcomm o cualquier equipo con un procesador de Intel de 8ª o superior generación, equipos que ya llevan varios años en el mercado y que podemos encontrar con interesantes descuentos.