El registro de Windows es una base de datos donde el sistema operativo guarda todo tipo de información y de configuraciones tanto propias como de los programas que tenemos instalados. Este registro está cambiando constantemente. Cada vez que instalamos, actualizamos o usamos un programa se crean o modifican distintas entradas en él para que todo pueda funcionar con normalidad. El problema es que, con el paso del tiempo, van quedando entradas innecesarias en el registro, entradas huérfanas de programas que solo aumentan el tamaño de este.
Cuando hablamos de realizar un mantenimiento a Windows, una de las tareas a las que se suele hacer referencia es a limpiar el registro. Como analizar una a una las entradas de esta base de datos (tiene miles de ellas) es literalmente imposible, existen programas para CCleaner, que pueden darnos más problemas de los que solucionan. Con dejar que Windows istre su registro, y que se limpie a sí mismo con el Sensor de Almacenamiento de Windows 10, es suficiente para tener nuestro PC siempre a punto.
En caso de que algo salga mal, esta copia de seguridad nos permitirá restaurar los cambios (aunque sea desde el Modo Seguro) para hacer que el PC vuelva a funcionar sin problemas.