6 versiones de Windows que puedes ejecutar en tu navegador sin instalar nada en el PC

El sistema operativo como tal es uno de los elementos software más importantes que encontramos en nuestro equipo. En la mayoría de las ocasiones nos decantamos por instalar Windows, aunque esta no es la única propuesta de la que podemos echar mano.
También tenemos la posibilidad de probar diversas distribuciones de Linux, todo ello de forma gratuita. Es más, si no queremos instalar estos sistemas de código abierto en nuestro PC, siempre tenemos la posibilidad de echarles un vistazo a través de una máquina virtual, por ejemplo.
De manera paralela en determinadas circunstancias también nos puede interesar probar diversas versiones de Windows sin tener que instalarlas de forma definitiva en el PC. Para ello precisamente están los emuladores que tenemos la posibilidad de ejecutar directamente desde nuestro navegador web. Esto, entre otras cosas, nos permitirá rememorar viejos tiempos o recordar determinadas funciones que teníamos en otras versiones del software de Microsoft.
Precisamente en estas mismas líneas os vamos a mostrar algunas de estas versiones de Windows que tenéis la posibilidad de ejecutar directamente desde el navegador web. Además, son compatibles con la mayoría de estos tales como Google Chrome, Firefox o Microsoft Edge.
Versiones de Windows para probar desde el navegador web
En estas líneas os vais a encontrar con una serie de emuladores a los que podéis acceder de forma directa con tan solo introducir la correspondiente URL en el navegador. Así tendréis la posibilidad de rememorar viejos tiempos instalar nada en el PC.
Windows 95: seguro que los más veteranos recordáis esta versión del sistema de Microsoft que nos devolverá a los años 90. Gracias al emulador DOSBox, este compila el código fuente de una imagen de disco de Windows 95 en JavaScript directamente desde el navegador. Podemos acceder a dicha imagen
Tiene muchas limitaciones en cuanto a sus funciones y aplicaciones preinstaladas, pero nos servirá para hacernos una idea del funcionamiento del software.
Son versiones muy limitadas
Aunque se trata de proyectos muy curiosos, la verdad es que son herramientas muy limitadas, diseñadas más por la curiosidad, y nostalgia, que para dar una utilidad real. A medida que avanzados en generación (por ejemplo, con Windows 11) nos encontramos con que no es más que una interfaz web con la que podemos hacer muy poca cosa.
Sin embargo, esto no quita mérito a sus desarrolladores, y se trata de proyectos de lo más interesantes que podemos tener siempre a mano.