Chrome es el navegador web desarrollado por Google, que se ha convertido en los últimos años en todo un referente y el más usado a nivel mundial. Pese a que cuenta con una amplia competencia, los s lo tienen claro. Y es que si por algo se caracteriza es por su velocidad y confiabilidad, aunque no por ello se encuentra libre de problemas. Y es que en ocasiones nos podemos encontrar de que éste funciona cuenta con un comportamiento lento que estropea nuestra experiencia de navegación.
Aunque hablamos de un navegador que se caracteriza por ser bastante sólido y estable, hay ocasiones donde nos podemos encontrar con ciertos problemas de disminución de rendimiento que provocan que vaya más lento y deteriore la carga de la página. Hay diferentes factores por los que puede ocurrir y hoy vamos a abordar posibles soluciones al respecto.
Causas por las que Chrome va lento
Si mientras estamos usando Chrome y navegando por nuestras webs preferidas notamos que todo fluye de manera más lenta y notamos cierta falta de fluidez es que algo no va bien en nuestro navegador. Por ejemplo, nos podemos encontrar con problemas comunes como que se retrase a la hora de realizar búsqueda o al cambiar entre pestañas. También cuando una web tarda más de lo habitual en cargarse o al cargar un vídeo en YouTube vemos que sigue almacenando búfer a la vez que muestra espacios en blanco.
Los motivos por los que esto puede ocurrir pueden ser varios, como, por ejemplo:
- Demasiadas pestañas abiertas.
- Muchas extensiones activadas.
- Acumulación de archivos temporales.
- Problemas con la caché.
- Uso del modo suspensión o hibernación.
Dado que las causas pueden ser diversas puede que no haya una solución concreta para nuestro problema por lo que posiblemente sea necesario probar distintas soluciones hasta dar con aquella que lo arregle por completo.
Soluciones a Chrome cuando va lento
Antes de nada, debemos tener muy presente que en estos momentos Google Chrome es uno de los programas más utilizados a nivel global. Esto es algo que se hace extensible tanto a los equipos de sobremesa como a los móviles. De ahí que los fallos y problemas que podamos tener con este software son muy comunes, aunque también en muchas ocasiones tienen una fácil solución. De ello ya se encarga su desarrollador para intentar optimizar al máximo el funcionamiento es un navegador.
A continuación, vamos a ver diferentes acciones que podemos llevar a cabo para terminar con el problema de lentitud del navegador de Google.
Cierra las pestañas que ya no utilizas
Google Chrome siempre se ha caracterizado por ser un devorador de recursos sin fin. Cuantas más pestañas abrimos, el número de recursos necesarios para mantenerlas actualizadas y disponibles para el se va incrementando, especialmente entre las pestañas que incluyen actualizaciones automáticas o que transmiten algún tipo de contenido multimedia. El motivo por el que Google sigue sin modificar el funcionamiento de su navegador, suspendiendo la actividad de las pestañas que no utilizamos lo desconocemos, pero al final, el perjudicado siempre es el mismo el .
A no ser que nos merezca la pena mantener una pestaña abierta para consultar cualquier tipo de información, es recomendable cerrarla de nuestro equipo. Si queremos tenerla a mano, podemos añadirla a la barra de marcadores para poder abrirla rápidamente cuando nos haga falta. De esta forma, los recursos del equipo se destinarán a mejorar en rendimiento de Google Chrome y no a mantener pestañas abiertas en segundo plano, pestañas que, probablemente no vamos a consultar.
Cierra las aplicaciones que no necesitas
Además de cerrar las pestañas en segundo plano, también debemos tener la precaución de cerrar todas y cada una de las aplicaciones que tenemos abiertas en segundo plano pero que no tenemos pensado utilizar. De esta forma, vamos a liberar una gran cantidad de memoria que el equipo puede dedicar a que Chrome funcione de forma fluida. Como podemos ver, tanto si se trata de pestañas abiertas o de aplicaciones en segundo plano, la solución siempre para mejorar la velocidad del navegador de Google pasa por eliminar proceso que no utilizamos para que la aplicación principal pueda echar mano de toda la memoria del equipo si fuera necesario.
Reproduce vídeos a menor calidad
En multitud de ocasiones utilizamos el navegador que nos propone el gigante de las búsquedas Google para reproducir vídeos streaming. Esto es algo que tendremos a realizar a través de las muchas plataformas online de las que podemos echar mano en estos momentos. Desde Netflix, pasando por YouTube o cualquier otra plataforma de este tipo, podemos tener abiertas varias pestañas con vídeos diferentes bien en pausa o reproduciéndose en ese instante.
Evidentemente este es uno de los contenidos que más gasta en lo que se refiere al ancho de banda disponible que tengamos. No hace falta decir que todo ello puede afectar negativamente al funcionamiento del programa y a la carga de páginas si abrimos otras ventanas o pestañas para visualizar nuevas webs. Es fácil imaginar que siempre podremos cerrar esas pestañas de vídeos para así ahorrar recursos y ancho de banda. Pero esta no siempre es una solución válida.
Por tanto podemos buscar una solución alternativa sin tener que cerrar contenidos de este tipo. Hay que tener en consideración que la mayoría de las plataformas streaming de vídeo nos permiten personalizar la resolución de reproducción a utilizar de forma predeterminada. Esto reduce de manera importante el consumo de recursos y de conexión para que así podamos trabajar con más fluidez en el navegador. Por tanto un cambio que os recomendamos hacer es reducir dicha calidad o resolución de los vídeos que estén en reproducción en ese instante para así mejorar el funcionamiento del resto de pestañas que no contienen vídeos.
Además esto es algo que se hace especialmente patente en aquellos equipos antiguos o si disponemos de una conexión con un ancho de banda limitado. También podemos llevar a cabo este movimiento de manera paralela con otro de los consejos que os hemos dado en estas mismas líneas.
Reiniciar el sistema
Es probable que cuando no usemos el PC durante un tiempo prolongado tengamos configurado el sistema para que este pase a ejecutarse en modo suspensión o hibernación para de esta forma reducir el uso de energía. Esta medida tan habitual puede suponer también la causa de la lentitud a la hora de volver a utilizar Chrome, una vez volvemos a usar el ordenador con normalidad.
Al restaurar el navegador, no vamos a perder ni las contraseñas ni los marcadores, ya que estos se encuentran almacenados en nuestra cuenta de Google y se restauran automáticamente cada vez que iniciamos sesión.
Comprueba la velocidad de internet
Si después de realizar los ajustes que os hemos indicado, Chrome sigue funcionamiento más lento de lo normal, tarda mucho en cargar cualquier página que visitemos, deberíamos comprobar si el problema no está en nuestro equipo o en el navegador en sí. Cabe la posibilidad de que el problema se encuentre en la velocidad de nuestra conexión a internet. Para comprobar si el problema se encuentra fuera de nuestro equipo, podemos debemos medir la velocidad de descarga, un proceso que podemos hacer a través de la web Testdevelocidad.
Además, de comprobar la velocidad, también debemos fijarnos en la latencia (ping), el número que se muestra junto a las letras ms (milisegundos). Este número indica el tiempo que tarda el servidor de internet en responder a nuestras peticiones. Por lo general, este número no debería ser superior a 10. Pero, si no es así, lo más probable es que el problema se encuentre en nuestra conexión. Antes de llamar a nuestro proveedor, lo primero que debemos probar y que es lo mismo que nos van a decir, es a reiniciar el router. Si tras reiniciar el router, la latencia sigue siendo la misma, es hora de ponernos en o con nuestro proveedor a internet para que busque una solución o nos ayude a encontrarla.
Elimina software del inicio del sistema
Algunos de los programas que instalamos en Windows de manera convencional, por sí mismos se configuran hola para ponerse en funcionamiento al mismo tiempo que encendemos el ordenador. Esto puede llegar a consumir una buena cantidad de recursos del equipo y afectar de forma negativa a programas que utilizamos realmente como es el navegador del que os hablamos.
Llegados a este punto lo mejor que podemos hacer es abrir el de tareas del propio sistema de Microsoft situarnos en la pestaña llamada Inicio. Aquí ya podremos deshabilitar todos los procesos y aplicaciones que se inician de forma automática al arrancar el ordenador y que no necesitamos en primera instancia. Veremos que se han añadido más programas de los que podríamos pensar en un principio, lo que resta muchos recursos a nuestro PC.
Prueba con un navegador más ligero
Lo cierto es que este tipo de programas en concreto que nos permiten movernos por Internet cada vez son más completos y complejos. Básicamente esto quiere decir que con el paso del tiempo cada vez nos ofrecen una mayor cantidad de funciones y herramientas, lo que muchas veces afecta negativamente a su rendimiento. Como no podía ser de otro modo esto es algo que se hace especialmente evidente si disponemos de un equipo antiguo o un tanto limitado en cuanto a su hardware.
Con todo esto lo que os queremos decir es que, si no conseguimos mejorar el rendimiento de este navegador de Google con alguno de los cambios mencionados antes, quizá debamos plantearnos el cambio de programa. Este sector del software está repleto de soluciones muy interesantes, y algunas de ellas caracterizadas principalmente por ser navegadores ligeros. Así podremos disfrutar de internet al tiempo que el programa como tal no consume toda la U hoy memoria RAM de nuestro ordenador. Buenos ejemplos de todo ello lo encontramos por ejemplo en la propuesta llamada Maxthon o en el navegador web Brave.
Soluciones extra alternativas
Hay momentos en los que nada parece dar resultado. No te preocupes porque aún no hemos gastado las balas de las soluciones. Puede que un simple gesto o acción sencilla suponga la medicina que hace falta par que Chrome deje de ir lento y funcione en condiciones en Windows.
Usar el Modo Incógnito
El modo incógnito puede ayudarnos a descartar otros problemas y a mejorar el rendimiento en Chrome. Para abrirlo solo tienes que pulsar Ctrl + Shift + N (o Cmd + Shift + N en Mac) y empezar a navegar. La clave es que este modo desactiva automáticamente todas las extensiones y no carga los datos de caché ni cookies de la sesión habitual.
La cuestión es, que si Chrome funciona mucho mejor en este modo, podremos ponernos sobre la pista de que posiblemente sea alguna extensión la que está dando problemas. Desde ahí, podemos ir desactivando extensiones una por una en el modo normal (en «Configuración > Extensiones») o limpiar la caché como ya explicamos más arriba.
Cambiar el perfil de en Chrome
Cuando un perfil de tiene mucha “solera”, es decir, que lleva tiempo configurado y acumulando opciones, es normal que acumule datos de marcadores, contraseñas, extensiones y ajustes personalizados. Esto puede hacer que en ocasiones se corrompa o tenga que procesar demasiados datos. Para probar si esto es lo que afecta, lo mejor es crear un nuevo perfil desde «Configuración > Personas > Añadir persona». La idea es navegar un un rato con ese perfil nuevo. Si todo va mejor, siempre podremos quedarnos con el nuevo perfil o intentar reparar el antiguo exportando tus marcadores y reiniciándolo.
Una extensión que optimice el navegador
Hemos hablado de las extensiones como las posibles culpables, pero algunas también pueden usarse para optimizar el rendimiento del navegador. Una opción clásica era «The Great Suspender», que suspendía pestañas inactivas para liberar memoria, pero como ya no se actualiza, hay que buscar alternativas como «Tab Suspender» o «Auto Tab Discard». Lo que hacen es reducir el consumo de RAM pausando las pestañas que no se están usando.